La carretera de la muerte y sus famosas apariciones

La denominación de carretera de la muerte se utiliza para varias vías por su alta siniestralidad. Aquí sabrás cuál es la ruta española denominada así por sus accidentes, pero también por sus apariciones.

La carretera de la Muerte en España

El tramo de la carretera N-430 entre las localidades de Luciana y Puebla de Don Rodrigo, en Ciudad Real, destaca por su alta siniestralidad. La cantidad de medio centenar de muertos y 270 informes de salida de vía constatados por la Guardia Civil en 10 años, hasta 2019, así lo atestigua. No ha de extrañar, pues, que a este tramo de 45 kilómetros se le haya denominado carretera de la muerte. Para muestra, un botón: en 2017 se registraron 87 accidentes.

Hay que señalar que esta carretera cuenta con numerosos aspectos que provocan que sea poco segura. El primer elemento a tener en cuenta es la estrechez, puesto que pasa por una zona de sierra. En segundo lugar, su estado de conservación, francamente mejorable. Finalmente, el hecho de que 800 camiones la recorren diariamente porque es la ruta natural de Extremadura a Levante. Este conjunto de circunstancias ha contribuido a la inseguridad endémica del tramo, que es uno de los más peligrosos del país.

Esta situación trágica va añadida del testimonio de apariciones en el trayecto, presumiblemente de fallecidos. Los programas del misterio se han dedicado a realizar reportajes que atestiguan esta circunstancia. La objetiva dificultad de este tramo, que va de la sierra al valle, favorece las visiones misteriosas, sobre todo nocturnas.

Las apariciones en este tramo de carretera

Las creencias tradicionales hablan de que los fallecimientos violentos o inesperados dejan una presencia etérea. El resultado es que la energía permanece en el lugar. Hay numerosos testigos que señalan que, en los últimos años, se han encontrado con presencias esquivas o paranormales. Estas presencias son más evidentes durante la noche. La teoría, pues, señalaría que esas presencias atestiguan las vidas que se perdieron.

El relato no hace, si no, reproducir otras teorías antiguas que señalan que hay una concentración de energía donde ha habido accidentes. Lo cierto es que el inconsciente colectivo tiene tendencia a identificar estos lugares como funestos. No ha de extrañar, pues, que en estos lugares sucedan fenómenos extraños y (aparentemente) inexplicables.

Lo curioso de las apariciones de la N-430 es que, a diferencia de lo que ocurre en otras vías, aquí no se da el mito de la chica de la carretera. Los testigos coinciden en señalar que estas presencias no son permanentes y que la tendencia es a que desaparezcan rápido. Si se tiene en cuenta que esta carretera se considera maldita por los lugareños, no ha de extrañar que se hable poco de estas circunstancias.

Conclusión

La carretera de la muerte en España es, de alguna manera, el testimonio de lo mucho que hay que mejorar en infraestructuras. El elemento de misterio es importante y tiene que ver, sobre todo, con la energía que acumula el lugar. ¿Te interesan los temas de misterio? No dudes en entrar en el portal para leer las novedades que publicamos.